Blogia
Odilum

Fallas de Valencia 2005

El pasado sábado tuvo lugar la Mascletà que anunció el fin de las Fallas, que es la fiesta por excelencia y de mayor trascendencia dentro de la Comunidad Valenciana, la cual tiene ya una larga historia. Luz, pólvora, música, flores y color son elementos constantes de dicha celebración. Esta fiesta destaca por su singularidad y belleza, por ello y mucho más ha sido declarada de Interés Turístico Internacional.
Durante la semana fallera la ciudad se convierte en un irónico museo abierto al público las 24 horas y compuesto por una artística colección de más de 350 monumentos de cartón piedra, "plantados" en mitad de las calles.
Arte y humor se entremezclan en forma de divertidos "ninots" que provocan la carcajada del pueblo valenciano por la atrevida crítica a la sociedad y política del momento.
Son éstas unas fiestas extrovertidas que se viven en la calle al compás de las bandas de música, el olor a buñuelos y chocolate caliente y el desfile de las jóvenes valencianas embellecidas por sus trajes regionales. Pólvora y fuego en las "mascletàs” y en los castillos de fuegos artificiales, algarabía contagiosa, fervor mariano hacia la Virgen de los Desamparados, devoción a San José.... pero sobre todo tradiciones vividas y vivas que se renuevan cada año con la llegada de las fiestas josefinas.
Un fuego purificador termina con la belleza efímera de las monumentales fallas a lo largo de la noche del 19 y la madrugada del 20 (cremà), aunque la tristeza es también breve al saber que se ha cerrado un ciclo natural y se inicia el nuevo con la llegada de la primavera, que renueva los espíritus de todos los que amamos estas fiestas tan singulares inspirándonos para las fallas del año siguiente."

0 comentarios